Todos somos vulnerables, pero muchos no
sabemos a que. No tenemos miedos, tampoco temblores, no tenemos alma
ni vemos colores, vivimos en la intemporalidad de un atrezo gris. Sabemos que amamos y que odiamos, pero a veces no,
somos unos apáticos selectivos, somos cadáveres andantes. Vivimos
respirando y nada más, intoxicándonos, con múltiples y diversos
venenos: alcohol, tabaco, estupefacientes, amor... Solo sabemos que
andamos buscando algo, muchas veces sin saber qué, pero sabemos que
hay un objetivo que algún día descubriremos, seguimos una senda
buscando el destino para el que fuimos concebidos, somos seres
finitos que saben que caducarán, somos hojas que tarde o temprano se
marchitarán... No tenemos miedo
de morir, solo de envejecer, y puesto que sabemos que esto sucederá
me suicido un poco mas rápido que la mayoría abrazando los extremos
de la realidad, por que en esta vida prefiero morir viviendo que
vivir muriendo.